LAS SEMILLAS

    


Semillas... cuando nos referimos a que algo es una semilla, generalmente, queremos decir que es el "comienzo" de una cosa, un génesis que desencadenará un suceso. Las semillas son, efectivamente, el origen de una de las formas de vida más importantes para, valga la redundancia, la vida: las espermatofitas, el linaje más extenso de las plantas vasculares*, que a su vez, son el tipo de ser vegetal terrestre con mayor presencia en el planeta.

¿Qué son las semillas?

Las semillas son unidades reproductivas propias de las plantas vasculares superiores, que se forman a partir del óvulo vegetal, generalmente, posterior a la fertilización.

Las semillas son el producto de la doble fecundación de las flores, que forman un cigoto diploide en el embrión, y un endospermo triploide, que desarrollará el tejido que funcionará como alimento de reserva para el embrión.

Podemos decir que la semilla es un óvulo fecundado, transformado y maduro. 

Formación de la semilla

La formación de la semilla cuando un grano de polen llega a un estigma (generalmente son varios granos de polen los que alcanzan el estigma). Dentro del grano de polen, se forman las células espermáticas, mientras los ovarios se producirán en el óvulo de la planta.

Para que los gametos puedan alcanzar el óvulo, el grano de polen comienza a absorber algunas secreciones desprendidas por el estigma, y comienza a germinar. De esta manera, se forma el tubo polínico, que crece y avanza por la pared del estilo y del ovario, hasta llegar al óvulo. Cuando el polen se establece en un pistilo compatible, el tubo polínico puede comenzar a germinar en respuesta a un fluido azucarado o lípidos producido por el estigma maduro. El tubo polínico también conoce en qué dirección moverse para alcanzar el óvulo gracias a químicos desprendidos por este último. A esto se le conoce como quimitropismo*.



Mientras tanto, en el óvulo se desarrolla el saco embrionario, que posee 8 núcleos (resultantes de las tres cariosinesis* de la macrospora) haploides*, en 7 células, una de ellas, con dos núcleos.

Una vez formado el tubo, un par de células espermáticas comienzan a bajar a través de este, entrando en el óvulo. 



Cuando se encuentran en el óvulo, se produce una doble fecundación: uno de los espermatozoides se une con el ovario, mientras que el otro, se une con los dos núcleos.



De la fusión del espermatozoide con el ovario, se produce una nueva célula: el cigoto. El cigoto se dividirá numerosas veces, hasta formar una estructura que conocemos como el embrión, que está preparada para crecer a una nueva planta bebé. Dentro de los embriones encontramos a los cotiledones*, la plúmula* y la radicula. Al endurecerse, al mismo tiempo, las paredes del óvulo, obtenemos una semilla.

¿Qué le ocurre a la flor? 

  • Al haber múltiples granos de polen que alcanzan  el estigma, múltiples óvulos se verán transformados en semillas, no obstante, aquellos que no sean fertilizados, se desintegrarán con el tiempo.  
  • Los estambres no se necesitan, así que comienzan a secarse.
  • Los pétalos no son necesarios, así que comienzan a caerse.
  • El ovario comienza a agrandarse, hasta convertirse en una fruta, que dentro, tendrá semillas.

Al sembrar una semilla, podemos ver cómo se forman las raíces a partir de la radicula, el tallo, desde la plúmula, y podemos observar cómo los cotiledones se agrandan (pues son los que nutren a la semilla). Mientras pasa el tiempo, el tallo crece en hojas que alimentan a la planta, así que, al no ser necesarios más los cotiledones, estos se secan y se contraen.  

Características de las semillas

Tamaño

Son de tamaño variado. En las orquídeas, donde son de menor tamaño, un solo fruto puede contener hasta 4 millones de semillas. En el coco doble, en cambio, una semilla puede pesar 20 kg.

Forma

Tienen varias formas, y adaptaciones importantes para su transporte y distribución hasta diferentes lugares (donde se dan condiciones adecuadas de humedad y temperatura para su germinación).

Entre las formas resultantes de estas diversas adaptaciones para garantizar su germinación, podemos hallar:
  • Lisas: No tienen una adaptación definida. Ejemplo: Semillas de maíz.
  • Fibrosas: Los tegumentos* de las semillas tienen largas fibras duras. Ejemplo: Semillas de calabaza
  • Rugosas: La superficie de la semilla es irregular. Ejemplo: Semillas de cítricos.
  • Arilo: Los tegumentos son fibrosos y muy lignificados*. Ejemplo: Semillas de durazno.
  • Ariloide: La semilla tiene una membrana viscosa en una punta. Ejemplo: Semillas de uvas.
  • Carúncula: Se caracteriza por tener un largo filamento fibroso que envuelve la semilla. Ejemplo: Semilla de falsa acacia. 
  • Alada: Tienen estructuras membranosas a manera de alas. Ejemplo: Semillas de coníferas.
  • Vilano: Son semillas que tienen gran cantidad de cerdas para transportarse por el viento. Ejemplo: Todas las plantas asteráceas.
  • Pubescente: Semillas recubiertas por pelo. Ejemplo: Semillas de algodón.
  • Filamentosa: Tiene más de un filamento o eje. Ejemplo: Semillas de geranio.
Las semillas tienen, además, ciertas adaptaciones que les permiten germinar en ciertos ambientes. Estas adaptaciones, son: 

Latencia
Periodo de vida latente que permite a la semilla esperar condiciones favorables para su germinación. Puede variar entre semillas, dependiendo del lugar donde se encuentren para mantenerse.

Quiesencia
Vida latente a niveles de metabolismos más bajos, cuando sus condiciones son controladas artificialmente, permitiendo almacenarlas en ambientes viables por largos periodos de tiempo.

Condiciones intrínsecas
Son las necesarias para que se produzca la germinación, a nivel interno de la planta. Algunas de estas son: la semilla madura, el embrión desarrollado, el endospermo listo para nutrir el embrión, los ápices activos, etc.

Condiciones extrínsecas
Condiciones externas a la planta necesarias para que germine. Estas son: agua, aire y la temperatura apropiada. 

Glosario

Plantas vasculares: Plantas con raíz, tallo y hojas, que son alimentadas gracias a un sistema vascular que se encarga de distribuirles el agua y los nutrientes, para que puedan desarrollarse y crecer.

Cariosinesis: División del núcleo.

Haploides: Célula o tejido que contienen un solo juego de cromosomas; la mitad de las diploides. En los humanos, los gametos, es decir, óvulos y espermatozoides, son las únicas células haploides. Todas las demás son diploides, y contienen 23 pares de cromosomas.

Qumitropismo: Crecimiento o movimiento de una planta en respuesta a un estímulo químico. 

Cotiledones: Proveen al embrión con toda la comida que necesite una vez comience a crecer, hasta que se formen las hojas.

Plúmula: Es la parte del embrión que al desarrollarse dará lugar al tallo. 

Radicula: Parte del embrión que crecerá como las raíces de la nueva planta.

Germinación: Proceso mediante el cual crecen nuevas plantas a partir de las semillas.

Tegumentos: Tejido vegetal que cubre ciertas partes de las plantas.

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